El cuerpo de Chile: Las Yeguas del Apocalipsis

Por Carmen Carrillo V.
Profesora de Lengua Castellana y Comunicación

¿Quiénes eran las Yeguas? Las Yeguas eran, antes que nada, dos homosexuales pobres, lo que en un país homofóbico y jerarquizado (en donde ser pobre es una vergüenza, y pobre y artista, un delito) constituía casi una invitación a ser pasado por las armas en todos los sentidos”. 1

Es tal vez con estas palabras del autor de Los detectives salvajes la mejor manera de comenzar a hablar sobre LasYeguas de Apocalipsis, colectivo de arte formado en el año 1987 por Pedro Lemebel2 (1952-2015) y Francisco Casas3 (1959), quienes se reúnen a finales de la década de los ochenta -en plena transición democrática- para realizar acciones de arte a modo de protesta. En ese contexto, Lemebel y Casas son los protagonistas de alrededor de veintisiete acciones y performances artísticas.4 Dirigieron su trabajo a cuestionar los terrores de la dictadura, el falso retorno democrático y el nuevo adoctrinamiento social en manos del modelo neoliberal. En ese sentido, el trabajo del cuerpo fue el lienzo y el estandarte con el que ocuparon un espacio prohibido como lo fue la calle. En el caso de Las Yeguas del Apocalipsis, se cumple la escenografía corporal y se subraya por medio de sus acciones el compromiso social y el rechazo a los nuevos modelos sociopolíticos implantados. Lograron por medio de sus cuerpos evidenciar a los negados; a aquellos cuerpos silenciados que representaban la vergüenza –ya sea por su carácter sexual, económico o político– por lo cual traer sus acciones a reflexión tiene que ver con lo que se comenzó a gestionar en la política una vez iniciada la postdictadura.

Trabajar la temática del cuerpo en Las Yegua de Apocalipsis destaca su afán por resistir a los esfuerzos de la dictadura por hacer desaparecer y silenciar el cuerpo marginal, secuestrado, torturado y desaparecido. Escriben un discurso paralelo que ayuda a transmitir esa memoria que la historia oficial quería silenciar.

MEMORIA Y CUERPO

Luego de la Primera y Segunda Guerra Mundial la memoria pasa a ser uno de los temas más estudiados a nivel mundial. Por poner un ejemplo de lo anteriormente mencionado, Theodor Adorno sentencia que es un acto de barbarie escribir poesía luego de lo ocurrido en Auschwitz. Esta y otras reflexiones alrededor del tema de la Shoah abren la discusión alrededor de la función e importancia que adquieren los mecanismos de recuperación de la memoria.

En el contexto chileno, la muerte sistemática de miles de personas ocurrida durante la dictadura cívico- militar a partir del año 1973 también es un claro ejemplo de una situación de carácter social desde la que se puede problematizar el concepto de memoria, ya que lo ocurrido demanda una revisión del pasado desde diferentes perspectivas: desde la administración política de la misma, la objetivación académico-científica de esta, hasta la producción de objetos culturales que reflejan los traumas a los que se sometieron diferentes subjetividades.

Prácticamente durante diez años Las Yeguas del Apocalipsis desarrollaron su trabajo como activistas íntegras a la hora de posicionar su visión y resistencia frente al proceso transición democrática chilena. Su trabajo proyectó en la memoria una visión crítica del pasado y cómo este se ha materializado en la historia oficial del presente. El rescate memorial, personal y colectivo que hacen de las víctimas del régimen militar, hace viable afirmar que el trabajo desarrollado buscara un rescate consciente del espacio público y la memoria silenciada por medio de la utilización del cuerpo como significante de apropiación. Lo anteriormente planteado utiliza como vehículo un cuerpo disidente, indefinido y mutable, con el cual, se busca la recuperación de espacios públicos en los que sea posible sociabilizar las silenciadas formas de violencia ocurridas en Chile.

La corporalidad en sus acciones buscó resistencia. La forma en que despliegan sus cuerpos es clave a la hora de articular los efectos específicos que buscan generar. Poner de forma transversal las problemáticas que conllevan el tema de los cuerpos, hace posible pensar sobre aquellas dimensiones deseantes que operan en acciones como las ejecutadas por Las Yeguas, que ayudan a revelar la posición histórica que se
tenía sobre la memoria desde su postura subalterna, haciendo posible que los cuerpos se encuentren con otros confrontado una causa en común. La entrada del sistema neoliberal trae consigo que el manejo de los temas relacionados con las dictaduras sea tratado en beneficio de sus intereses simbólicos y materiales. Pensar las problemáticas que plantean desde sus cuerpos maricas, hace viable una lectura del
cuerpo fuera de la norma en donde convergen categorías históricas que son utilizadas en el colectivo como base para dar cuenta de su resistencia y ejercicio de memoria.

En este contexto, la respuesta artística es una reflexión por medio del cuerpo, en un momento histórico crucial de reformulación social. El salir a la calle y mostrar ese cuerpo que se resiste a los dictámenes del yo resulta primordial a la hora de hacer visible el cuerpo social que a su vez evidencia el cuerpo histórico. Son sus cuerpos los que buscan a los cuerpos faltantes —desaparecidos— en una historia puesta al margen por la historia oficial, actuando desde las fisuras del oficialismo. Su lucha contra la dictadura y contra el Estado militarizado se materializaba por medio de esos cuerpos que no habían sido disciplinados por la lógica oficial: aquella que perseguía homogeneizar esa figura social por medio de políticas culturales acordes con las voces dominantes que abogaban por la unidad y la nación.

1 : : Bolaño, R. (2004). Entre paréntesis. Barcelona, España: Anagrama (p.76)
2 : : Pedro Lemebel (1952-2015): escritor, cronista y artista plástico chileno. Su obra escrita aborda los temas de la marginalidad chilena utilizando para ello algunas referencias autobiográficas. Algunos de sus libros son: La esquina de mi corazón (1995), Loco afán: crónicas de sidario (1996), De perlas y cicatrices (1998),Tengo miedo torero (2001), entre otros.
3 : : Francisco Casas (1959): artista y escritor chileno ha publicado los libros: Sodoma Mía (1991), Yo, yegua, (2004), Romance de la Inmaculada Llanura (2008) y Romance del Arcano sin Nombre (2009). Actualmente vive en Lima, Perú.
4 : : Para profundizar véase en: http://www.yeguasdelapocalipsis.cl/category/acciones/

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